Blogia
Canarias contra el GNL

El Sureste grancanario se debate entre combustibles fósiles o limpios (www.canariasahora.com)

REPORTAJE EN EL PERIODICO DIGITAL WWW.CANARIASAHORA.COM


La disyuntiva energética se decide en Arinaga

"El Archipiélago debe tomar las riendas de su futuro" y la Mancomunidad del Sureste "ya es hoy un ejemplo" de autosuficiencia, subrayan desde la Universidad

Los ecologistas advierten de que el gas supone "ahondar en el monopolio" e instan a que "permanezca en pequeñas manos" y no beneficie a "los amigos empresarios"


Arinaga representa las dos alternativas energéticas para Canarias. De un lado la introducción del Gas Natural Licuado (GNL) y, por otro, la apuesta por las energías renovables basadas en la fuerza eólica, hidráulica y solar que poseen las Islas. Las dos opciones no son del todo contrapuestas, ya que abogan por energías más limpias que el petróleo. Aún así, la llegada del gas, un derivado, supone dar continuidad al yugo histórico de Canarias al oro negro y, por otra parte, los planes propuestos para la aplicación de las energías renovables se han desoído. Pero la decisión final no tendrá consecuencias sólo en Gran Canaria, sino que se trasladará al resto de las islas por el efecto dominó.


PAULA RUÍZ JIMÉNEZ. Las Palmas de Gran Canaria

La introducción del gas en el Archipiélago viene de la mano de la ampliación y creación de las infraestructuras necesarias en el puerto de Arinaga. Este pueblo duerme tranquilo acunado por el ruido del mar. Sus gentes habitan en casas terreras que se apilan a lo largo de un enorme paseo marítimo y bajo una distribución urbanística compuesta por grandes avenidas y rotondas, donde las palmeras tropicales han sido sustituidas por esbeltos molinos de viento. La comarca ha asimilado gran parte de la inmigración que arriba a la Isla y, aunque comenzó siendo dormitorio, en la actualidad la gran parte de la población está afincada en el lugar.

El municipio crece al compás de las industrias instaladas en el polígono, que cuenta con una superficie de 6 millones de metros cuadrados, distribuida en cinco fases, y zona residencial. La participación de la industria al Valor Añadido Bruto (VAB) de Gran Canaria ha disminuido de forma drástica en los últimos años, de forma que no alcanza el 9%, casi toda concentrada en los municipios de Las Palmas de Gran Canaria, Telde y Agüimes. Las tres zonas acumulan el 82% del VAB de la producción industrial insular.

Desde la Autoridad Portuaria de Las Palmas se apuesta por la ampliación del puerto de Arinaga y unir el transporte hortofrutícola y de pasajeros con la introducción del gas en Canarias. El presidente 'forzado' de la Asociación Mixta de Arinaga en calidad de máximo responsable del Gobierno canario, José Manuel Soria, ha subrayado en múltiples ocasiones el carácter complementario que tendrán estas infraestructuras portuarias y augura que "se convertirán en un punto de apoyo para todas las industrias de esos núcleos".

Expertos, ecologistas y vecinos critican "el ocultismo y secretismo con el que se ha llevado el proyecto y sus posibles consecuencias"; las dimensiones de la obra; el impacto medioambiental; los peligros para la población; la gestión politizada; y, ante todo, reclaman que existen otras alternativas que deben plantearse y discutirse antes de decidir.

Los expertos auguran una crisis energética mundial inminente, muy lógica debido a la caducidad del petróleo. La demanda de energía eléctrica en las Islas se ha disparado hasta alcanzar un crecimiento del 51% en seis años, una cifra récord en España. El Archipiélago utiliza en exclusiva el petróleo como energía para la producción de electricidad y para el abastecimiento de todos los medios de transporte. Para el futuro se apuesta por las energías renovables, tesis defendida por la Federación Ecologistas en Acción-Ben Magec y el propio Gobierno de Canarias. Sin embargo Antonio Hernández, como portavoz del grupo ecologista, lamenta que las propuestas "apenas se han aplicado".

Si las Islas no son autosuficientes, en el momento que comience el descenso de las reservas de crudo y el ascenso vertiginoso de los precios, las consecuencias de la recesión internacional devastaría la economía dependiente de las Islas.

Pero surgen proyectos que lanzan alternativas reales. El Archipiélago posee el potencial suficiente como para autoproveerse energéticamente con sus recursos naturales. De esta forma se lograría romper con la dependencia externa y abastecernos a largo plazo cuidando el medio ambiente y todo lo que le rodea.

Canarias podría convertirse en un ejemplo para el mundo poniendo en práctica el vapuleado concepto del desarrollo sostenible. Los proyectos están sobre la mesa.

Un futuro diáfano

"Canarias debe tomar ahora las riendas de su futuro energético", máxima avalada por el catedrático en Ingeniería Mecánica de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria y ex directivo del Instituto Tecnológico de Canarias (ITC), Roque Calero, y que define el momento estratégico que regirá las actuaciones venideras.

Por su parte, el Gobierno regional apuesta por la ampliación del puerto de Arinaga y crear todas las infraestructuras necesarias para la introducción del gas en las Islas (ver reportaje ya publicado y titulado Canarias ya huele el negocio del gas).

Ben Magec, la Asociación Patinegro y los grupos vecinales no rechazan su llegada, pero solicitan más información, otra ubicación para las instalaciones y, ante todo, que se escuchen otras alternativas energéticas, ya que el propio consejero de Economía y Hacienda, José Carlos Mauricio, "ha aceptado que este combustible sólo durará 40 años".

La Mancomunidad del Sureste siempre fue una comarca pobre, pero "hoy en día sin que ellos sean conscientes son un ejemplo" de autosuficiencia, atestigua el también ex director de I+D del Instituto Tecnológico de Canarias. En la actualidad, la demanda energética de las 100.000 personas que conforman esa comunidad está cubierta, ya que se abastecen en un 80% de agua desalada del mar, donde interviene activamente la energía eólica.

La depuradora de la comarca tiene una capacidad de 12.000 metros cúbicos al día y una producción anual que roza los 4 millones de metros cúbicos, aunque tras someterse a procedimientos terciarios se convierte casi en potable de nuevo, de forma que puede ser utilizada para el riego en invernaderos. La región cuenta también con una potente desaladora, con una capacidad de 33.000 metros cúbicos/día.

El proyecto del catedrático Roque Calero pretende perfeccionar esta imagen de autosuficiencia. Apuesta por convertir a la Mancomunidad en un referente, en un laboratorio desde donde se experimente, se implante y se lideren prácticas encaminadas a conseguir un desarrollo sostenible. Cada eslabón está unido al siguiente y expandirá estos conceptos hasta lograr que todas las islas se sustenten por sí mismas. El plan presenta mejoras en casi todos los sectores, pues fortalece el industrial, fomenta el turístico y refuerza el agrícola.

Las tres acciones del plan para la Mancomunidad se desarrollarían en la zona de Pozo Izquierdo, bahía de Formas y la playa del Burrero, pero, más allá de su ubicación real la aplicación de estas ideas se transplantarían al resto del Archipiélago.

En las tres ubicaciones se edificarían conjuntos residenciales bioclimáticos autosostenidos por energías renovables para alojar a los investigadores, trabajadores y turistas que se acerquen a la comarca, los cuales pueden generar unos 2,6 millones de euros anuales con sólo pasar por una de las instalaciones. Con los alquileres de estas viviendas se podrían recaudar 1,2 milones de euros al año, y las tasas turísticas embolsarían a las arcas del plan, 3 millones anuales.

Entre las apuestas para Pozo Izquierdo destaca sus grandes posibilidades para el deporte y ocio alternativo. La primera opción consiste en construir en el desértico barranco de Tirajana las infraestructuras necesarias para el disfrute de los deportes de vela en tierra. El agua tiene su trono en el Centro Internacional de Surf, preparado para la enseñanza de una práctica que cuenta en la Isla con la celebración de varias pruebas de competiciones internacionales.

La comunidad cuenta con parques eólicos con un potencial instalados de 70 megavatios (MW), ampliable hasta 150 MW, lo que supone una producción de 234.000 MW al año. Lo que se pretende es hacer partícipe al visitante del paisaje y habilitar las instalaciones para ser visitadas.

En bahía de Formas, el mar creado con las mallas de los invernaderos cubre la totalidad del horizonte. Los productos de la zona, tomates y hortalizas principalmente, poseen una superficie cultivada de 100 hectáreas y consumen una media de 6.000 metros cúbicos de agua al día. Estas plantaciones suponen una gran fuente de riqueza para la comarca, debido a que facturan una media de 18 millones de euros. El plan embellecería estas explotaciones para presentarlas al público y poder recorrerlas como si de un jardín botánico se tratara. Los productos serían sustituidos por cultivos de alta tecnología, "sin tierra, hidropónicos, aeropónicos, protegidos contra las plagas, donde trabajarán hombres con bata blanca", es decir, técnicos cualificados.

El proyecto se completaría con la Eurovilla de tratamiento agrícola, que se convertiría en una plataforma para que las personas con menos recursos aprendan las técnicas y puedan transplantar estos cultivos tecnológicamente tratados a sus tierras.

Por último, en la playa del Burrero se instalaría la Escuela del mundo, donde convivirían estudiantes provenientes de todos los países y donde se enseñarían técnicas de desarrollo sostenible para poder trasladarlas y aplicarlas a su regreso. Los estudiantes podrían combinar la formación con su aprendizaje en la Escuela Internacional de Windsurf. "Un foro que parta de las nuevas exigencias y oportunidades de la globalización para descubrir las potencialidades locales y permitir su aplicación a la solución de los problemas del entorno".

El presupuesto total estimado para el proyecto ronda como mínimo los 76 millones de euros y existen varias líneas para su recaudación, tanto la financiación pública como la privada. El plan incluiría el empleo directo de 650 personas y cerca de 500 puestos de trabajo indirecto, lo que supone una importante inyección económica y social, "pues se lograría incluir a la población inmigrante en un proyecto común".

Se calcula que con la aplicación de este plan energético podría ahorrarse una media de 244.000 euros en agua potable, nada despreciable si se considera que el gasto de agua en un año alcanza los 8 millones de metros cúblicos. Asimismo, el consumo de energía alcanza los 110.000 MWh/año y con este plan se lograría ahorrar cerca de 3,36 millones euros en gasto energético.

Yugo azabache

Otra opción para el desarrollo energético de la comarca la presenta el Gas Natural Licuado (GNL). La Autoridad Portuaria de Las Palmas aseguró que el nuevo puerto estaría operativo a partir del 21 de febrero, de forma que se completará la primera fase de su construcción, en la que se han invertido más de 21 millones de euros. Resta la entrega del informe de impacto medioambiental para que continúe el proceso y se ponga en marcha la segunda fase de la ampliación de este puerto, que contempla una inversión de 45 millones de euros. Los ecologistas auguran, cargados de ironía, que la ampliación de las instalaciones portuarias "va a retrasarse, lo que se traduce en duplicar los costes, aunque no exista presupuesto, pero los empresarios de la construcción necesitan áridos, es decir, necesitan obras públicas, puertos y aeropuertos".

Cuatro uniones temporales de empresas (UTE) compuestas por ACS; Sato; Pérez Moreno; Dragados; Drase; Matías Marrero; FCC Construcción; Santana Cazorla, Necso y Lopesan, así como la constructora Ferrovial y Agroman, se han presentado para realizar la segunda fase del muelle de Agüimes, cuyo presupuesto asciende a 21 millones.

"La idea viene de los años 80. En esa época se pensó en el gaseoducto Sáhara-Tinduf, se estudió, pero el proyecto resultaba muy costoso y se desechó", explica Antonio Hernández. El GNL es un combustible fósil, ya que deriva del petróleo. Llegará en estado líquido a través de buques metaneros al puerto de Arinaga, donde se ubicará la planta de regasificación necesaria para devolver el combustible a su estado gaseoso. El proyecto conlleva agrandar el puerto, ocupando 2,2 kilómetros y afectando a 4,8 kilómetros de costa.

Los colectivos ecologistas alegan que la ubicación de la planta regasificadora incumple tanto la normativa ambiental de la Unión Europea (UE) como el Reglamento de Actividades Molestas, Insalubres, Nocivas y Peligrosas (RAMINP), que establece una distancia mínima de 2.000 metros de los núcleos habitados para instalaciones energéticas de este tipo. Advierten de que la ampliación portuaria dejará prácticamente al municipio de Santa Lucía sin zona de ocio para la población, perdiéndose una de las zonas más importantes para la práctica del surf y windsurf. Además, afectará a la zona de reposo de aves protegidas y tortugas, sebadales, y las corrientes sedimentarias.

Por otro lado, la liberación de los sectores energéticos en Canarias no se ha traducido en un aumento de la competitividad de las empresas. El preciado combustible estará en manos de Gascán, (Compañía Transportista de Gas Canarias) empresa participada por Endesa (74%); el Gobierno canario a través de la empresa Sodecan (21%), aunque el Ejecutivo regional venderá su participación cuando el sector se haya consolidado; y finalmente, las dos cajas de ahorro isleñas con el 5%.

Endesa, accionista mayoritaria, compra la producción, lo que supone -apunta Hernández- "ahondar en el monopolio energético". La otra postura aboga por que "el gas permanezca en manos de pequeños empresarios y del público". De esta forma se diversificaría y no terminaría en manos de "los amigos empresarios".

Los vecinos de la zona comienzan a desperezarse, ya que hasta ahora muchos desconocían el proyecto para el Puerto. La asociación cultural y ecologista Patinegro, con Raúl Vega Artiles a la cabeza, ha reclamado explicaciones a Antonio Morales, alcalde de Agüimes, para que abandone "su posición ambigüa" ante la planta de gas. El panorama se completa con "los partidos políticos de la comarca, que se desvinculan y no ejercen oposición".

Según una encuesta realizada para la página en Internet de la zona industrial de Arinaga formada por la Asociación de Empresarios (Aenaga) y la Entidad de Conservación del Polígono (Ecoaga), a la pregunta de si le parece interesante la utilización del gas como fuente de energía, el 53,21% rechaza con rotundidad esta opción y dirige la mirada a la mejora de las fuentes eólicas, frente al 17,38% que considera una posibilidad la introducción de este combustible gaseoso.

Los colectivos solicitan que la construcción de la planta de gas se traslade a las inmediaciones de la central de ciclo combinado de Unelco-Endesa en el barranco de Tirajana y desembarcar el gas licuado mediante un sistema off shore, boyas o la utilización de un barco que incluye una planta regasificadora en su interior, embarcación que ya se utiliza con gran éxito en California y todo el Golfo de México, donde más de 10 instalaciones gasísticas fueron obligadas a cerrar debido a la presión ciudadana. Esta posibilidad permitiría alejar las actividades relacionadas con el gas del entorno humano.

Con la entrada en vigor del Protocolo de Kioto, la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, ha pedido con urgencia medidas para frenar "el cambio climático, posible mediante la innovación tecnológica y los cambios de hábitos".

Esto se traduce en aplicar políticas de ahorro energético que permitan reducir el consumo entre un 10 y un 15%. Hernández pide la construcción en Gran Canaria de una central de hidrobombeo, que podría generar, aprovechando las presas de Soria y Chira, el 5% de la energía que se consume. Implantar centrales de energía solar fotovoltaica o aplicar un correcto desarrollo de la energía eólica se posicionan entre los caminos que pueden elegirse.

Ejemplos existen muchos. Los laboratorios Sandia National y la empresa Stirling Energy System han construido la "granja solar" para dotar de electricidad a los hogares estadounidenses. Según sus responsables, una plantación de panales solares de 160 kilómetros podría abastecer de energía a todo Estados Unidos.

Existen innumerables opciones sobre la mesa para discutir las vías energéticas futuras. La disyuntiva actual conlleva que el futuro presente dos paisajes, uno donde los parques eólicos continúan moviendo sus aspas, y otra donde los esqueletos de la planta y sus obras cubrirán el horizonte.

0 comentarios